
Año 1451. Los tiempos son malos. Castilla hierve en una agonía constante. El rey, preocupado por las artes, protector de la poesía, es sin embargo débil de carácter y ha descuidado las labores de gobierno en manos de un válido todopoderoso, ambicioso y tenaz: don Álvaro de Luna; y es este ministro omnipotente quien en realidad gobierna los reinos de Castilla. La Corte vive solo pendiente de los espectáculos que el ministro organiza.
Libro: Isabel la Católica
Adaptación: Basilio Losada
Edición 1976
EDICIONES AFHA INTERNACIONAL, S.A.